El nuevo paradigma de modelo de gestión inteligente: La intuición no lo es todo
- Por Alfonso Díaz del Río Díaz de Bustamante, Sponsor de la Comisión de “Tecnología y Smart Cities” de IFMA España.
¿Cuántas veces decimos que los facility manager somos los que hacemos que todo fluya, que la oficina funcione, que los empleados estén a gusto…? Hasta hace apenas unos años, lo hacíamos desde nuestra experiencia, desde nuestra intuición. Sin embargo, hoy la tecnología nos brinda la posibilidad de no solo apoyarnos en nuestra intuición, que por supuesto no debemos dejar de lado, sino también apoyarnos en la información que nos proporcionan los datos para tomar nuestras decisiones.
La analítica de datos nos tiene que ayudar a transformar simples datos en significados, en relaciones, en patrones, y sobre todo en decisiones que, al apoyarse en esta información, van a ser siempre más coherentes, más objetivas y más inmediatas. Así, por ejemplo, mediante el simple conteo del número de personas que entran en un aseo podremos decidir cuándo ir a limpiarlo, o entendiendo los patrones de teletrabajo de las personas podremos decidir si debemos tener más o menos fruta preparada.
Tampoco nos debemos obsesionar con la cantidad de datos a gestionar, no todo tiene que ser “big-data”, muchas veces el “small-data” es más efectivo. Es decir, debemos tener muy claro cuáles son los datos fundamentales que nos ayudan a tomar las decisiones correctas, tener los históricos, no parar de alimentarlos y tener un buen cuadro de mando que los controle. Nosotros, como facility managers, debemos tener siempre visibles datos como consumos energéticos, utilización de edificios, puestos de trabajo disponibles, salas de reunión, plazas de aparcamiento, localización de activos, nivel de iluminación, temperatura, humedad, etc.
A pesar de decir que no debemos obsesionarnos con la cantidad de datos, una vez empiezas a trabajar con ellos es difícil parar. Es una nueva forma de orientar tu modo de pensar, tu manera de trabajar. Quizás al principio te cuesta ver todo su potencial, pero una vez vas enlazando unos datos con otros, analizando patrones, sacando conclusiones y, sobre todo, cuando ves que te facilita tu día a día será difícil que dejes de usarlos.
Los datos no existirían si no hubiese tecnología. La tecnología es el habilitador para poder disponer de los datos. La tecnología entendida en sus dos espectros, el del hardware y el del software. Necesitamos elementos hardware tipo dispositivos IoT, para geolocalizar activos, contar accesos, medir la temperatura, pero a la vez necesitamos softwares de gestión, como el GMAO o el BIM, que permitan actuar sobre los activos, la climatización o gestionar los espacios.
En conclusión, aprovechemos el poder de la tecnología y de los datos para pasar de actuar por intuición a actuar por conocimiento.