- Por Marta Piedrafita, Country Manager de osapiens para España y Portugal.
Cuando el 24 de mayo el Consejo de la Unión Europea dio su aprobación definitiva a la Directiva sobre la diligencia debida en materia de sostenibilidad de las empresas (Directiva CSDDD, por sus siglas en inglés), el Parlamento Europeo y el Consejo se pronunciaron a favor de la Directiva, más de 5.000 empresas fueron conscientes de que deberán iniciar medidas preventivas y correctoras, establecer un procedimiento de reclamación y elaborar un plan de protección del medio ambiente para dar respuesta a las exigencias de la nueva legislación. Una directiva común y uniforme sobre la cadena de suministro que busca promover en todos los países miembros de la Unión Europea los derechos humanos y las normas medioambientales a lo largo de la cadena de suministro.
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Se verán afectadas las empresas de la UE con más de 1.000 empleados cuyo volumen de negocios neto anual global supere los 450 millones de euros. Así como aquellas compañías no pertenecientes a la UE que generen un volumen de negocios neto superior a 450 millones de euros en la UE también están incluidas en la directiva. Las empresas matrices de grupos que alcancen los umbrales mencionados también deben cumplir con las exigencias de la directiva. A las estructuras de franquicia y holding se les aplican normas especiales. En total, se verán afectadas unas 5.500 empresas en Europa.
Los incumplimientos o violaciones de esta ley acarrean graves sanciones, que pueden llegar a ser hasta del cinco por ciento del volumen de negocios neto global a nivel nacional.
¿Cómo deberían prepararse las compañías para la ley de la cadena de suministro de la UE?
La CSDDD requiere la recopilación, tratamiento y preparación de las grandes cantidades de datos para la verificación completa basada en el riesgo de toda la cadena de suministro. Será esencial que las compañías afectadas implementen sistemas automatizados para la evaluación. Este es el único camino para que puedan identificar rápidamente los riesgos y actuar en consecuencia. La gestión sólida de datos es esencial para asegurar la integridad y la disponibilidad de los datos requeridos.
Además, las compañías afectadas deberán establecer un procedimiento de reclamación transparente y eficaz que permita a las partes interesadas informar de forma efectiva sobre preocupaciones o incumplimientos de las obligaciones de diligencia debida.
Estos requisitos hacen que sea esencial para las empresas digitalizar y automatizar sus procesos de información. En este sentido, la solución idónea sería contar con un software capaz de recopilar y tratar grandes volúmenes de datos y prepararlos para la elaboración de informes profesionales. No sólo debe ser capaz de realizar análisis complejos de nivel N para supervisar las cadenas de suministro indirectas, sino también ofrecer ajustes flexibles en el análisis de riesgos para manejar una amplia gama de escenarios de riesgo. Además, el sistema debe ser lo suficientemente adaptable como para cumplir diferentes requisitos normativos y legales.
Tecnología de fácil implementación
Por otro lado, las compañías necesitan ser ágiles en la implementación de los nuevos procesos que les permitan dar respuesta a la nueva normativa. Para ello, deben apostar por herramientas tecnológicas que sean sencillas, simples, fáciles de implementar y que se adapten a sus programas. La tecnología debe ser una ayuda en el cumplimiento ESG, no un punto de fricción para las empresas.
Automatizar los procesos manuales y optimizarlos supone un gran ahorro de costes y de tiempo, volviendo a las empresas más eficientes y permitiéndoles crear mayor transparencia en su cadena de valor. Transparencia cada vez más demandada por partners y clientes, que apuestan de forma creciente por empresas sostenibles, con valores y que se preocupen de la sociedad en la que operan.
Ante este panorama, la solución pasa por el uso de una plataforma cloud. Esta plataforma deberá ser actualizada constantemente, tanto desde el punto de vista tecnológico como legal, ya que deberá incluir todas las novedades de las normativas y adaptarse a las revisiones y/o ampliaciones de las leyes.
Además, la plataforma deberá apoyarse en tecnologías que van desde IA, IoT o Track & Trace, de forma que sea capaz de permitir la recopilación y comunicación de datos, el análisis de procesos, el seguimiento del ciclo de vida de los productos y la detección de problemas de conformidad y piratería.
Principales beneficios de incorporar tecnología para cumplir con la CSDDD
- Transparencia de los socios comerciales a través de información corporativa sobre la cadena de suministro y el propio negocio. osapiens HUB permite cumplir la legislación sobre la diligencia debida en la cadena de suministro para LkSG/ CSDDD) y la protección de los denunciantes.
- Transparencia de productos mediante la conexión de los flujos de productos y datos en las cadenas de suministro: a nivel de producto, artículo o lote. Evita las falsificaciones, satisface la creciente demanda de información por parte de los clientes y cumple la legislación sobre diligencia debida en la cadena de suministro.
- Eficiencia en operaciones. La plataforma también permite gestionar las operaciones de la forma más eficaz, crear procesos fluidos y rápidos, mejorar la calidad del servicio y reducir costes. También permite gestionar sus activos utilizando datos de sensores y organizar y planificar servicios (de mantenimiento o distribución), tanto internos como de asistencia al cliente.
- Estrategia y reporte de sostenibilidad. Todas las partes de una organización y su cadena de suministro deben tenerse en cuenta y participar en una estrategia de sostenibilidad centrada en el valor y el impacto empresarial. En línea con los requisitos de la Directiva sobre Informes de Sostenibilidad Corporativa (CSRD), osapiens HUB ayuda a definir temas materiales basados en impactos, riesgos y oportunidades, a establecer objetivos y planes de acción, y a elaborar un informe auditable.
